Nadie al volante: la carrera por el coche autónomo se intensifica

EE.UU. – La imagen de un automóvil en movimiento sin conductor al volante dejó de ser una rareza en ciudades como San Francisco, Los Ángeles, Phoenix, Austin y Atlanta. En todas ellas ya opera de manera comercial un servicio de robotaxis, vehículos autónomos que transportan pasajeros como parte de la flota de Waymo, la filial de conducción autónoma de Alphabet, matriz de Google.

Estos taxis sin conductor se han convertido en parte del paisaje urbano, ofreciendo traslados a través de aplicaciones móviles similares a las de plataformas de transporte tradicionales. La compañía destaca que sus unidades funcionan con sistemas avanzados de inteligencia artificial, sensores de última generación y mapas de alta precisión que permiten la conducción sin intervención humana.

Phoenix fue la primera ciudad en aprobar de forma amplia el servicio de robotaxis de Waymo, y desde entonces la expansión hacia otras urbes se ha acelerado. En la actualidad, miles de usuarios ya utilizan este servicio como alternativa de movilidad, mientras las autoridades reguladoras supervisan su desempeño en materia de seguridad y eficiencia.

La empresa sostiene que el objetivo es avanzar hacia un modelo de transporte más seguro, accesible y sostenible, reduciendo la dependencia de conductores humanos y minimizando los accidentes provocados por errores humanos.

Pese a los avances, el despliegue de los robotaxis no ha estado exento de debates sobre seguridad, convivencia en el tráfico y el futuro del empleo en el sector transporte. Sin embargo, el crecimiento del servicio apunta a que la conducción autónoma será cada vez más común en el entorno urbano de Estados Unidos.