Juan López
Por Juan López
Como
resultado de nuestras reflexiones, al final de cada año, desde el 2014, asumí
el hábito de publicar mis buenos deseos y metas fundamentales para la R.
Dominicana (RD) al año siguiente. Ese compromiso también lo cumplí, el pasado
31 de diciembre de 2024, con el artículo “Principales aspiraciones para RD en
el 2025”, publicado en este importante medio de comunicación.
Previamente,
publiqué un “Balance socio-económico y político RD, 2024”, el 29 de diciembre
de 2024, en el que identifiqué los principales acontecimientos y datos
que, lamentablemente, arrojaron un balance negativo por fallidas
ejecutorias del gobierno del PRM-Abinader y porque no fueron satisfechas las
expectativas que crearon en el pueblo con la dispendiosa publicidad
gubernamental.
En esta
ocasión, al concluir el primer trimestre de 2025, presentaré los
resultados del monitoreo del nivel de realizaciones de esas once metas, a los
fines de auscultar las bases de sustentación de esos propósitos y vislumbrar
las posibilidades de sus realizaciones en lo que resta del 2025.
A
continuación dichas aspiraciones con sus correspondientes cotejos a los niveles
de realizaciones:
“1.-
Preservar la paz social y política, la seguridad jurídica, el respeto a las
libertades, derechos humanos e implementar políticas públicas para motorizar la
modernización, el progreso y la justicia social.” Considero que, en sentido
general, se está cumpliendo.
“2.- Detener
el incremento de la onerosa deuda externa, conservar la estabilidad
macroeconómica, impulsar el PIB por encima del 5 %, reducir los
precios de los principales productos de la canasta alimentaria y realizar un
aumento general de salarios.”
Exceptuando
la proyección del PIB y el aumento del salario mínimo del sector privado no
sectorizado; el gobierno del PRM-Abinader no está cumpliendo con esa
significativa meta y, por el contrario, ya envió al Congreso otros 5
préstamos, se incrementó la tasa de cambio con tendencia a superar el 70 y, por
consecuencias, aumentará la inflación y el precio de la canasta básica nacional
que ya supera los 47 mil pesos.
“3.- Aplicar políticas públicas para bajar los altos porcentajes de la
pobreza (23 %) y de los empleos informales (55 %).” Con estos renglones el
presidente Abinader solo ha hecho “bultos” en el discurso del pasado 27
de febrero.
“4.- Superar
las improvisaciones e implementar acciones eficaces para enfrentar
la inseguridad ciudadana, el caos en el transporte y la inseguridad vial,
así como la violencia social y los feminicidios. En estos seis aspectos el país
ha empeorado. El gobierno del PRM-Abinader ¡no ha pegado una!
5.- Mejorar
la calidad de los servicios públicos, especialmente, en la educación, la salud
y la energía eléctrica disminuyendo los odiosos apagones.” ¡Todas estas
aspiraciones van de mal en peor!
“6.- Que
el Congreso Nacional apruebe los códigos Penal, Laboral, de Agua,
la Seguridad Social y realice una correcta elección de los nuevos
miembros de la Cámara de Cuentas.” ¡Promesas y chácharas! a excepción del
“chanchuyo” que están haciendo con la elección de los integrantes de la Cámara
de Cuentas.
“7.- Hacer
honor a la cacareada transparencia gubernamental y la lucha contra la
corrupción y la impunidad conociendo los “46 expedientes de corrupción del
actual gobierno” que la Directora General de la DEGEIG entregó a la
Procuraduría General y finiquitar los procesos por corrupción que
se hallan empantanados en los tribunales.”
De
transparencia solo se habla en la costosísima propaganda gubernamental. La
impunidad y la corrupción siguen “nadando en sus turbias aguas”. De los casos
de corrupción entregados por la directora de la DEGEIG se ocultan los nombres
de los imputados y de las instituciones afectadas. Es el secreto de Estado
mejor guardado, ¡Cuánta opacidad gubernamental!
“8.-
Eficientizar la lucha contra el consumo y venta de drogas e
implementar acciones para cerrar el puente que, en nuestro país, está
utilizando el narcotráfico internacional.” Este tema ha sido utilizado
por el gobierno para hacer “bultos” y propagandas populistas. El problema del
narcotráfico y consumo de drogas crece, crece y no se observan acciones para
colocarle un verdadero y fuerte torniquete a este grave problema.
“9.- Circunscribir
las actividades políticas a la reorganización de las estructuras de los
partidos, la formación política de sus miembros y definir sus estrategias
generales y programáticas para los comicios de 2028. ¡Sin campaña electoral
este 2025!”
Las leyes 33-18
y 20-23 y la prohibición de campañas antes de octubre de 2027 han sido
pisoteadas, en especial cuando el presidente Abinader, orondo de emociones
triunfalistas, dio riendas sueltas a los precandidatos del PRM para que
realicen proselitismo ¡con recursos del Estado!
“10.- Que
los partidos de oposición, particularmente FP y PLD, asuman su rol de
contrapeso político enfrentando las malas prácticas gubernamentales,
congresuales y municipales y defendiendo los intereses del pueblo.”
FP y PLD trabajan en sus reestructuraciones, están realizando una
tibia oposición: pero también están entrando al terreno diseñado por el PRM con
la campaña electoral extemporánea.
“11.- Que los gobiernos municipales asuman sus responsabilidades con respecto a
la limpieza de sus respectivas demarcaciones recogiendo con eficacia las
basuras, asfaltando calles y construyendo aceras, contenes, parques e
instalaciones deportivas.” En abril cumplirán su primer año en el mismo
círculo vicioso y con un insignificante cumplimiento de sus competencias
institucionales. ¡Qué lástima!
Este primer balance arroja evidentes resultados negativos, con respecto a
las ejecutorias de las “Principales aspiraciones para RD en el 2025”. Todavía
albergamos la esperanza de mejoras para el resto del año, en atención al
carácter fajador y optimista del pueblo dominicano. ¡Ojala el gobierno tenga
ojo para ver y oído para escuchar, antes que resulte tarde!