Los Defensores

Servio Tulio considera violaciones masivas sugiere posibilidad de castración química

Servio Tulio Castaños Guzmán


El vicepresidente ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia, Servio Tulio, expresó su profunda indignación ante los casos de violaciones sexuales múltiples que han conmocionado al país y sugirió que la sociedad debería considerar la posibilidad de aplicar la castración química a los agresores.

“Cuando uno ve esos tipos de aberraciones, de abusos que no se justifican… la verdad es que esta sociedad va a tener que revisar muchos conceptos. No se trata de un hecho que quedó ahí, sino también de los niveles de morbosidad en las redes, al hacer esos vídeos públicos”, afirmó Tulio, durante un análisis sobre la violencia sexual en medios nacionales.

El experto insistió en que estas situaciones deben llevar a la reflexión colectiva. “Porque también son casos que ponen a uno a pensar si hechos como esos no merecerían la castración química. O sea, cuando uno ve ese tipo de aberraciones, de abusos que no se justifican, la sociedad va a tener que revisar muchos conceptos”, subrayó. 

Tulio se refirió también al papel de quienes graban y difunden estos crímenes: “Otra cosa, ¿quién fue que habrá grabado eso? ¿Quién lo difundió? Creo que el Ministerio Público tendrá que emplearse a fondo en este asunto, porque la sociedad dominicana está reclamando justicia. Se le deben preservar los derechos a las víctimas, y se debe aplicar todo el peso de la ley”.

Recordó que el marco legal vigente contempla sanciones de hasta 30 años para hechos de esta naturaleza, y advirtió que no se puede minimizar la gravedad de los casos: “Son 30 años. Estamos frente a un caso no solo escandaloso, sino grave. Y vemos cómo también se repiten situaciones como esa en otros lugares, incluso entre menores. Algo está pasando en la sociedad, algo que debemos revisar: la descomposición, la falta de valores, la ausencia de consecuencias”.

Finalmente, Tulio comparó los hechos recientes con casos internacionales que han generado debate: “Este caso tiene una connotación incluso mundial. Se compara con un caso que ocurrió en España, conocido como La Manada. Oigan, ¿por dónde anda este país? Cuando uno ve atrocidades de esta naturaleza, habría que reconsiderar cómo enfrentarlas. La sociedad no puede permitir que situaciones como estas se normalicen; no podemos aceptar que se repitan”.